BEATRIZ VIGNOLI
LUGAR
a Matías Gómez
No es un lugar seguro para las palabras,
la poesía: intemperie bajo el vidrio.
Las fotos en las tumbas se humedecen,
la sal come las cartas de los náufragos.
Qué náufrago tuviera una botella
con un corcho que encaje y nada filtre,
o hallara en su chalupa o en su isla
un papel y una birome que escribiera.
Qué náufrago contara con la calma
de confiarse al azar más absoluto
y esperar luego de haber vaciado
la última botella de su sed.
No es un lugar seguro para los mensjes,
una botella al mar: mito improbable,
un poema de amor en vez de amar.
Escribir es como vivir en una tumba.
MARCELINE DESBORDES-VALMORE
LA INQUIETUD
¿Qué es, pues, lo que me turba y qué es lo que me espera?
En el pueblo, me aburro; me apena la ciudad.
Los goces de mi edad
no me alivian el tiempo que nunca se acelera.
No ha mucho, la amistad, la estudiosa virtud,
llenaban, sin esfuerzo, mis ocios apacibles.
¿Qué objeto tendrán mis deseos indecibles?
Lo ignoro y lo persigo con creciente inquietud.
Si para mí la dicha no era la alegría,
y hoy, teniendo las lágrimas igual que la locura,
si tampoco la encuentro en mi melancolía,
¿dónde hallar la ventura?
SANDRA GUDIÑO
Abandoné mi departamento
y el barrio sur el mismo día
por desesperación soledad
y algún otro motivo
qué mitad del naufragio
soy pensé
¿la que flota
o la que se hunde?
Puse un pie en el laberinto
abandoné antorchas
demasiada luz inútil
cuando sólo existe
el deseo de perderse.
Defendí la causa
como se defienden los vidrios
que dan a la calle
del crudo vendaval
con la misma vehemencia
me abandoné en la poesía
llevo puesta la máscara de colibrí
pero nadie me cree.
CIRSE MAYA
VELOCIDAD CRECIENTE
Hay una
sensación de que los días pasan
a más velocidad y que no hay tiempo
de muchas despedidas.
Suena una voz, como de insecto,
por detrás de los días
y detrás de las noches
pequeño picoteo, pero que no se para
cuando quieres ver, los días se desmoronan
como si hubieran sido devorados por dentro.
(Las fauces invisibles
dan cada vez más veloces
dentelladas.)
ROSA CEDRÓN
A UN ENEMIGO
A Didier Barbier
Hay días en que me gustaría estar contigo,
recuperar, contra el mundo las transparencias que generábamos
El mundo se ausenta si no te encuentro;
Marean tantas puertas cerradas con llaves
Este estallido que no tiene principio ni fin…
La mano y la sombra de mi mano,
La letra y la sombra de la letra…
Tu negra figura talmúdica cruza mis pupilas como relámpagos
eco de los azahares de tu sangre andaluza;
una burla marcó el comienzo,
desde el vientre mugriento y obsedido de mi madre enferma.
Escríbeme Épervier
Rápido como un rayo recorrerás las calles sin mí
Vagabundos nocturnos y lágrimas de niño-Padre
El alcohol, una lágrima sobre tu piano… no robarás un banco esta noche…
Charenton Fans (París), invierno del 86
CHANTAL MAILLARD
FRAGMENTO 1
Je suis un revenant.
He vuelto de la muerte.
De la nada enorme
el
inmenso
vacío bajo el manto.
Je suis un revenant.
He vuelto transparente
fantasmal la palabra como un hilo
de
saliva temblando entre los labios.
In-vertido el curso del
habla.
¡Cuida bien tus deseos, tú
que vienes a oírme,
no sea
que se cumplan!
Quise volver entre los vivos
abandonar el don
de los
abismos. Quise
cerrar los ojos que mantienen
despierta en
las tinieblas y volver
a abrir los que distinguen
las cosas
por su luz.
Lo deseé. Lo quise. Ahora
añoro el reino de
las sombras.
Sofoco. Golpeo
el hielo endurecido
tratando
de abrir un agujero
un túnel que conduzca
de vuelta a lo
perdido. Me destrozo
las uñas. Resbalo.
He olvidado cómo hacer.
Contempla tus errores
tú que ahora penetras en mi celda,
que
yo consideré los míos
hace ya mucho tiempo.
DORA GONZÁLEZ
TIEMPO SIN RELOJ
Ya es hora
de ir desvaneciendo los circuitos de la sombra
mancha de lastre
que sitia y aprieta.
Es tiempo de sacar la telaraña enroscada en el pie
dejar a un lado los entierros
y plantar acordes del nacimiento
en la cima de la memoria.
¡Que salga disparado el corazón
hacia un bosque de luciérnagas
y saboree la ceremonia
con la primera gota de sol!
Con el cuerpo en vigilia
navegue por los brazos de un cielo maduro
llegue hasta el alma de las flores sin vértigo
y sea, calendario de brillo,
por la carnadura del viento.
Ya es hora de vencer.
FIORELLA TERRAZAS
ACOSO EN SAL
Juegos de Neptuno
Sirenas consternando ideas
Sus senos cálidos y frívolos
Se acercan con demencia
Alumbran el faro que alumbra al mar
Y el mar
Canta su vehemencia
Las extremidades azotan gotas unidas
Y aleteos más vivos que nunca.
Luchan en el cántico,
El mar se calla todo es pacífico
Empiezan las excitantes risas.
II
Todos quisieron poseerte
Los peces
La espuma de las olas
las gaviotas
Y tú
Perdida en los cánticos
Que otra vez empezó el mar a emitir
Allpa-puyu agua
Allpa-puyu agua
Tierra.
